martes, 26 de noviembre de 2013

puta perra sumisa

(+18) ADVERTENCIA
ESTA HISTORIA CONTIENE MUCHA VIOLENCIA Y ESCENAS DESAGRADABLES, SI SON MUY SENSIBLES NO LA LEAN.

acababa de borrar la vida pasada de mi nueva perra sumisa, ahora ya era mia y podia hacerle lo que quisiera, la saque de la jaula y la rape la cabeza, despues le puse una mascara de perro y se la cerre con un candado a la altura del cuello. me la lleve a mi habitacion para follarmela, cuando se la meti se corrio, ella lo intento disimular, ya que sabia que lo tenia prohibido, pero yo me di cuenta, le dije que iba a ser castigada de la manera mas dura que existe. ella me suplico que no lo hiciera, pero estaba decidido.
la deje dos semanas en su jaula, esperando a que las viejas heridas terminaran de cerrarse, cuando se cerraron le puse una correa a mi perra y me la lleve a la sala de los castigos.
una vez alli la inmovilice en la mesa, boca abajo y le puse una mordaza para no oir sus gritos de dolor.
primero la tenia que romper el culo, para eso use un dildo de metal que se expandia en su interior, cuando lo active ella empezo a retorcerse y a intentar gritar, al poco le salieron gotitas de sangre por el culo, yo aprovechando acerque la lengua y le lami el culito con la sangre y el dildo dentro. despues le meti otro dildo en el coño, pero este no le hizo daño. mi perra seguia temblando por el dolor de haberla roto el culo, yo la toque la cabeza y me rei, despues coji el latigo y le latigue la espalda 50 veces, le quite la mordaza para que pudiera darme las gracias a cada azote que le daba, cuando ya habia tenido suficiente le hice la marca de la perra, el peor castigo y mas doloroso por el que las perras tienen que pasar.
saque el palo de la chimenea al rojo vivo, lo mire y sin pensarmelo mas veces se lo apolle con fuerza en el culo, dejandole asi grabada la marca de perra, una polla de fuego grabada en su culito maltratado para siempre.
cuando el yerro toco su culo mi perra empezo a gritarr y a retorcerse como nunca antes lo habia hecho, lloro y gimió, pero sus ataduras la impidieron moverse, despues, casi sin voz consiguio pronunciar las palabras - gracias amo - y despues se desmayó.


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